Muerte Antoni Tapies : 7 Febrero 2012
Fue un prolífico artista que experimentó todas las técnicas, pero sobre todo fue un renovador, una presencia constante y medular del arte contemporáneo; quizás el último gran vanguardista del siglo XX.
El pintor catalán Antoni Tàpies, uno de los referentes de la pintura del siglo XX y en concreto del arte abstracto de posguerra, falleció a los 88 años. Observaba un estado de salud delicado desde hacía tiempo.
El pintor, nacido en Barcelona en 1923 en el seno de una familia burguesa, culta y catalanista, fue nombrado marqués de Tàpies en el año 2010 por su contribución a las artes plásticas.
Tàpies, que abandonó sus estudios de derecho para dedicarse al dibujo y la pintura, empezó a exponer su obra en la década de los 40. Entre los numerosos reconocimientos nacionales e internacionales que atesoraba figuran el ser académico de Bellas Artes de Berlín y miembro honorífico de la Kunstlerhans de Viena, la fundación de arte más antigua de Europa.
Recibió los premios Unesco y Príncipe de Asturias de las Artes (1990), Medalla Oro de Bellas Artes y Premium Imperiale de Pintura de la Asociación Japonesa de Arte.
Un gigante: MoMA
El Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York lamentó hoy la muerte del pintor español Antoni Tàpies, sobre quien expresó que “se ha ido uno de los grandes héroes del arte del siglo XX”.
La comisaria de pintura y escultura del MoMA, Ann Temkin, afirmó que Tàpies, quien falleció hoy a los 88 años, fue un gigante del arte contemporáneo, cuyo legado hará “que se mantenga vivo a pesar de su muerte”.
Temkin recordó que el pintor catalán fue uno de los más destacados tras la Segunda Guerra Mundial, momento en el que “el arte necesitaba ser reinventado”, algo que él logró abriendo los caminos de la abstracción por los que otros artistas transitarían posteriormente. “Tàpies dejó su impronta en incontables pintores, muchos españoles, pero también europeos y americanos, como Lucio Fontana o Robert Rauschenberg, con los que estableció una conversación dentro de los cauces de la pintura abstracta”, señaló la experta del MoMA.
Su relación con México
Antoni Tàpies fue un prolífico artista que experimentó todas las técnicas, pintó más de mil 500 cuadros; realizó alrededor de 300 esculturas y una producción gráfica considerable.
A decir de Miguel Ángel Muñoz, crítico y poeta mexicano, quien se propuso conocer y convivir con Tàpies para poder escribir sobre él y sobre su gran aportación, asegura que Antoni fue un renovador del arte de la segunda mitad del siglo XX. “Fue Tàpies quien reinventó la manera de responder al expresionismo abstracto estadunidense”.
Muñoz, quien es autor de Entrevista con Antoni Tàpies, asegura que fue un artista muy admirado y muy conocido en México, ya que su obra influyó en gran medida a varios creadores, en particular a los de la llamada “Generación de la ruptura”.
En 1991, el Centro Cultural Arte Contemporáneo en la Ciudad de México le organizó una exposición retrospectiva, a la que acudió el artista español. A partir de ahí, su obra empezó a ser parte de muchas colecciones en México, principalmente en el acervo de Rufino Tamayo, quien le compró dos cuadros.
Otro de los personajes con quien Tàpies cultivó una gran amistad fue Octavio Paz. En 1978, le realizó ocho grabados para Petrificada petrificante, libro de bibliófilo con poemas de Octavio Paz,en una edición limitada.
Al crítico y poeta Miguel Ángel Muñoz le tocó estar cerca de Tàpies a fines de 2011: “Es común decir que el artista seguía trabajando, pero no es así, porque yo estuve con él en noviembre del año pasado y ya lo veía ya muy mal, ya no escuchaba, prácticamente ya no dibujaba, estaba en ese sedentarismo que lo llevó por la sordera y la falta de visión. Eso lo tenía un poco deprimido”.
Las exposiciones de Tàpies cambiaron el rumbo del arte, sobre todo después de erigirse como el gran descubrimiento en Estados Unidos, durante su muestra en el Guggenheim Museum de Nueva York, en 1962, al mostrarse como la contraposición artística del impresionismo abstracto.
“El más grande junto a Picasso y Miró”
••• El fallecimiento hoy, a los 88 años, de Antoni Tàpies, ha provocado dolor en el mundo de la cultura española, que reaccionó de inmediato destacando en declaraciones su libertad, su lenguaje único y la importancia de una obra que le sitúa entre los principales artistas españoles del siglo XX.
Tàpies fue “una presencia constante en el arte español de la segunda mitad de siglo” en opinión de Manuel Borja-Villel, director del Museo Reina Sofía de Madrid, quien afirmó que su desaparición va a ser muy importante “aunque su obra y sus textos están ahí”.
Muy afectado, el pintor Luis Feito, fundador del grupo El Paso y que compartió con Tàpies experiencias en el París de los años 50, hizo hincapié en su trabajo “de investigación”, tanto en lenguajes como en materiales y su gran labor investigadora “buscando lenguajes nuevos, nuevas formas de expresarse y nuevos materiales”.
Por su parte, el historiador y crítico de arte Tomás Llorens afirmó que Tàpies era “el artista español más grande del siglo XX junto a Picasso y Miró” y continuó la herencia de Miró en su faceta más radical y vanguardista.
Fuente
El pintor, nacido en Barcelona en 1923 en el seno de una familia burguesa, culta y catalanista, fue nombrado marqués de Tàpies en el año 2010 por su contribución a las artes plásticas.
Tàpies, que abandonó sus estudios de derecho para dedicarse al dibujo y la pintura, empezó a exponer su obra en la década de los 40. Entre los numerosos reconocimientos nacionales e internacionales que atesoraba figuran el ser académico de Bellas Artes de Berlín y miembro honorífico de la Kunstlerhans de Viena, la fundación de arte más antigua de Europa.
Recibió los premios Unesco y Príncipe de Asturias de las Artes (1990), Medalla Oro de Bellas Artes y Premium Imperiale de Pintura de la Asociación Japonesa de Arte.
Un gigante: MoMA
El Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York lamentó hoy la muerte del pintor español Antoni Tàpies, sobre quien expresó que “se ha ido uno de los grandes héroes del arte del siglo XX”.
La comisaria de pintura y escultura del MoMA, Ann Temkin, afirmó que Tàpies, quien falleció hoy a los 88 años, fue un gigante del arte contemporáneo, cuyo legado hará “que se mantenga vivo a pesar de su muerte”.
Temkin recordó que el pintor catalán fue uno de los más destacados tras la Segunda Guerra Mundial, momento en el que “el arte necesitaba ser reinventado”, algo que él logró abriendo los caminos de la abstracción por los que otros artistas transitarían posteriormente. “Tàpies dejó su impronta en incontables pintores, muchos españoles, pero también europeos y americanos, como Lucio Fontana o Robert Rauschenberg, con los que estableció una conversación dentro de los cauces de la pintura abstracta”, señaló la experta del MoMA.
Su relación con México
Antoni Tàpies fue un prolífico artista que experimentó todas las técnicas, pintó más de mil 500 cuadros; realizó alrededor de 300 esculturas y una producción gráfica considerable.
A decir de Miguel Ángel Muñoz, crítico y poeta mexicano, quien se propuso conocer y convivir con Tàpies para poder escribir sobre él y sobre su gran aportación, asegura que Antoni fue un renovador del arte de la segunda mitad del siglo XX. “Fue Tàpies quien reinventó la manera de responder al expresionismo abstracto estadunidense”.
Muñoz, quien es autor de Entrevista con Antoni Tàpies, asegura que fue un artista muy admirado y muy conocido en México, ya que su obra influyó en gran medida a varios creadores, en particular a los de la llamada “Generación de la ruptura”.
En 1991, el Centro Cultural Arte Contemporáneo en la Ciudad de México le organizó una exposición retrospectiva, a la que acudió el artista español. A partir de ahí, su obra empezó a ser parte de muchas colecciones en México, principalmente en el acervo de Rufino Tamayo, quien le compró dos cuadros.
Otro de los personajes con quien Tàpies cultivó una gran amistad fue Octavio Paz. En 1978, le realizó ocho grabados para Petrificada petrificante, libro de bibliófilo con poemas de Octavio Paz,en una edición limitada.
Al crítico y poeta Miguel Ángel Muñoz le tocó estar cerca de Tàpies a fines de 2011: “Es común decir que el artista seguía trabajando, pero no es así, porque yo estuve con él en noviembre del año pasado y ya lo veía ya muy mal, ya no escuchaba, prácticamente ya no dibujaba, estaba en ese sedentarismo que lo llevó por la sordera y la falta de visión. Eso lo tenía un poco deprimido”.
Las exposiciones de Tàpies cambiaron el rumbo del arte, sobre todo después de erigirse como el gran descubrimiento en Estados Unidos, durante su muestra en el Guggenheim Museum de Nueva York, en 1962, al mostrarse como la contraposición artística del impresionismo abstracto.
“El más grande junto a Picasso y Miró”
••• El fallecimiento hoy, a los 88 años, de Antoni Tàpies, ha provocado dolor en el mundo de la cultura española, que reaccionó de inmediato destacando en declaraciones su libertad, su lenguaje único y la importancia de una obra que le sitúa entre los principales artistas españoles del siglo XX.
Tàpies fue “una presencia constante en el arte español de la segunda mitad de siglo” en opinión de Manuel Borja-Villel, director del Museo Reina Sofía de Madrid, quien afirmó que su desaparición va a ser muy importante “aunque su obra y sus textos están ahí”.
Muy afectado, el pintor Luis Feito, fundador del grupo El Paso y que compartió con Tàpies experiencias en el París de los años 50, hizo hincapié en su trabajo “de investigación”, tanto en lenguajes como en materiales y su gran labor investigadora “buscando lenguajes nuevos, nuevas formas de expresarse y nuevos materiales”.
Por su parte, el historiador y crítico de arte Tomás Llorens afirmó que Tàpies era “el artista español más grande del siglo XX junto a Picasso y Miró” y continuó la herencia de Miró en su faceta más radical y vanguardista.
Fuente